Ese dia no fui al trabajo, volvi a casa decidida a cambiar todo lo que odiaba, debía luchar por vivir y no por sobrevivir que era lo q hacia.
En cuanto llegue a casa meti unas pertenencias en una mochila y deje unas cartas dedicadas a mis familiares (en persona no hubiese tenido la valentia suficiente).
Al cerrar la puerta de casa, mi corazón palpitaba a todo galope, mis sentimientos estaban enfrentados, sentia ilusión y esperanza, pero tambien desolación y miedo.

Me dirigí a la estacion de tren , no sabia donde dirigirme.. pero me daba igual. Era de las pocas veces q podia pensar y decidir por mi misma. Sentia mi destino en las manos.
Cerre los ojos y señale..

Aqui comienza mi aventura.